Si quieres disfrutar de la naturaleza un plan inigualable será aquilar un chalet alpino, las casas típicas de la zona, con vistas a los Alpes. Súmale una fondue al lado de una chimenea, un buen vino blanco y de postre un buen chocolate. Son unas vacaciones donde disfrutar de la natraleza y la gastronomía suizas, algo que te dejará sin palabras.
La estancia fue muy agradable. Corinne nos ofreció todo tipo de explicaciones sólo llegar, pero hay dos puntos que creemos podrían mejorarse: Falta de extractor (lo que obliga a abrir las ventanas, la habitación huele a comida y entran mosquitos de fuera) y también ayudaría un microondas. Por lo demás, todo perfecto.