Situada al noreste del país,Berlín la capital de Alemania, es famosa por ser una ciudad de contrastes. De hecho para muchos es la ciudad menos alemana de toda Alemania y ello se debe en gran medida a su importante Historia. Berlín fue tristemente protagonista durante la Segunda Guerra Mundial, quedando destruida en un 75%. La ciudad ha tenido que ser reconstruida desde entonces y por ello, en Berlín puedes encontrar de todo, como un edificio de construcción moderna, junto a una casa antigua que tuvo la suerte de sobrevivir. Echa un vistazo a nuestras ofertas de alojamiento, porque con HomeToGo tendrás la oportunidad de quedarte en un departamento berlinés y empaparte del espíritu de esta increíble ciudad.
Curioseando
- El Muro de Berlín dividía a la ciudad en dos partes y mantuvo separadas a familias y seres queridos durante 28 años.
- Los que vivían en el Berlín Este no tenían acceso a muchos alimentos, como por ejemplo bananas o café.
- En comparación con otras capitales europeas, Berlín es una ciudad bastante económica.
- Debido a que ha tenido que ser reconstruida la mayoría de los edificios de Berlín tienen menos de 70 años.
- El muñequito de los semáforos de Berlín no es igual en todos los semáforos, en muchos se conserva el que era el icono comunista y que tiene nombre propio "Ampelmann".
- Dependiendo de si nos encontramos en la mitad Este o en la mitad Oeste, la luz de las farolas tiene un color distinto. Anaranjado para el este y mucho más blanco para el oeste. El lugar donde se suponía estaba el búnker de Hitler, es hoy un día un parking.
La vida en Berlín
Berlín es una de las ciudades más interesantes y fascinantes de Europa. Sus casi 30 años de división, dejan patentes muchas diferencias y contrastes entre unos barrios y otros. Además el pueblo berlinés, debido a la represión que sufrió, es hoy en día uno de los pueblos más libres, donde gentes de toda condición y estilos de vida, comparten por ejemplo un parque haciendo una barbacoa. La ciudad es también un imán para los artistas, de hecho en Berlín se dice que todo el mundo es artista. En sus principales plazas, podrás encontrar actuaciones de músicos callejeros o retratistas que simplemente hacen sus dibujos en el suelo. Artistas y gente de pensamiento libre acuden a Berlín, pues es el lugar para la cultura alternativa.
Qué ver y qué hacer en Berlín
Por supuesto una de las primeras cosas que tienes que ver es el Muro de Berlín o mejor dicho lo que queda de él y que se conoce con el sobrenombre de la East Side Gallery. Casi kilómetro y medio de restos de muro original, que desde hace unos cuantos años luce 103 murales, pintados por artistas de todo el mundo que rinden homenaje a la libertad y esperanza por un mundo mejor. El Museo del Muro está repleto de objetos y elementos de la época y es un buen lugar, donde hacerse una idea de este periodo. Hablar de zona centro en Berlín, es algo complicado pero si tenemos que quedarnos con un área, sería con el paseo de Unter den Linden, que va desde Alexanderplatz hasta la Puerta de Brandenburgo. Si tomas esta ruta, pasarás por delante de la Berliner Dom, la catedral de la ciudad. Un edificio de estilo neobarroco de finales del siglo XIX. Justo al lado encontrarás la Isla de los Museos. Se llama así porque el río Spree se bifurca en torno a una pequeña parcela de terreno formando una especie de isla. En ella, se encuentran 5 de los mejores museos de todo Berlín. Aunque todos son magníficos, si tienes que elegir tu cita debe ser con el Museo de Pérgamo, pues contiene maravillas como el antiguo Altar de la ciudad de Pérgamo y la Puerta de Ishtar de Babilonia.Si continúas más allá de la Puerta de Brandemburgo, llegarás al Reichstag, el Parlamento alemán. Es un edificio con una cúpula de cristal impresionante y además puedes visitarla de forma gratuita. Eso sí, te aconsejamos que pidas cita por Internet.Si hace buen tiempo, no pierdas la oportunidad de dar un paseo por el Tiergarten, el pulmón verde de la ciudad, que posee unas 210 hectáreas. Rentar una bici podría ser una buena idea para que puedas recorrerlo en su mayoría.Otro parque que merece una mención especial es el de Tempelhof. Originalmente construido por los Nazis, era un aeropuerto que fue declaro demasiado caro de modernizar, por lo que en 2008 ¡se convirtió en un parque!
Comer y beber
El plato típico de Berlín es la currywurst, una salchicha a la plancha que se sirve con papas bañadas en abundante salsa kétchup, espolvoreada con curry.Tampoco puedes dejar de probar un kebab. Este plato de la cocina turca, se encuentra prácticamente en cada esquina de la ciudad. Y si tienes antojo de cualquier otro plato de cocina del mundo, estás en el lugar idóneo, pues Berlín cuenta con infinidad de restaurantes internacionales y generalmente a precios bastante asequibles.Por supuesto dado que estás en Alemania, ¡no podemos olvidarnos de la cerveza! Es casi hasta más barata que el agua. Y aunque puedes encontrar cervezas de todo tipo, te recomendamos que pruebes una refrescante Berliner Weiße, una cerveza blanca de bajo graduación. Se toma pura o mezclada con un chorrito de jarabe de frambuesa.
Transporte en Berlín
Berlín cuenta con dos aeropuertos. El Aeropuerto de Tegel situado en la zona noroeste y el Aeropuerto de Schönefeld, en el sur. Ambos están aproximadamente a 30 minutos del centro y desde ellos es muy fácil llegar hasta el mismo, pues tienen un buen servicio de transporte público. El transporte en Berlín es increíblemente puntual y puedes elegir lo que más te convenga: metro ligero, metro, tranvía o camión. Eso sí, también debemos decir que tan buen funcionamiento tiene un coste y es que el ticket es bastante caro, en comparación con el resto de precios de la ciudad. Puede que la mejor opción sea hacerse con la Berlin Welcome Card, una tarjeta que permite el acceso a toda la red de transporte y además incluye descuentos en muchos de los museos y lugares de interés.